Por Lic. Ruth Roizner Selanikio
Entrevista a Silvio Raij: “Si lo puedes soñar, lo puedes hacer”
Durante toda mi infancia hasta la adolescencia fui a Hebraica Macabi y ese fue mi primer acercamiento al judaísmo. Recuerdo con mucho cariño los campamentos anuales que organizaban donde se fomentaba la unidad y el compañerismo como valores principales. Aún conservo algunos amigos de ese tiempo. Por otro lado, mi formación prescolar y liceal fue en un colegio laico donde se respetaban todas las religiones por igual. Hoy entiendo y agradezco la amplitud de visión que tuvieron mis padres en ese tiempo, al permitirnos a mí y a mis hermanos, poder elegir más adelante la religión a seguir, independientemente de nuestra tradición sanguínea. A nivel familiar, tan pronto falleció mi bisabuelo, la esencia de la tradición y las festividades se fueron perdiendo en la familia; él era el único que conocía bien las costumbres y que solía leer pasajes de la Torá durante las reuniones familiares. En lo particular, me interesan mucho las religiones, conocer sus tradiciones, su historia, sus principios y valores. Es sabido que el Judaísmo es de las religiones más antiguas que existen y me enorgullece pensar que yo soy descendiente de un pueblo tan ancestral.¿Cómo es que decides dedicarte al arte de la meditación?
Estaba pasando por un momento difícil en mi vida a nivel existencial, me preguntaba: ¿para qué estoy?, ¿cuál es mi propósito en la vida?, ¿cuál es la razón por la que vine a este Mundo? Estaba con todo ese rollo existencial, cuando conocí a una persona que me ayudó a encontrar las respuestas que buscaba. Un día le pregunté: ¿Cómo haces para estar todo el tiempo feliz y sin preocupaciones? ¿Cómo es que todo lo que te ocurre lo afrontas de forma positiva? Me respondió: “yo practico meditación”. A la semana siguiente, ya había comenzado mi primer curso y en pocos meses me estaba yendo a la India a profundizar lo aprendido. Así, todo en mi vida comenzó a cambiar: descubrí mi propósito en la vida, mis miedos fueron desapareciendo, mi cabeza se ordenó, se calmó, y por primera vez en años, me sentí feliz de ser yo mismo; tuve la certeza de que este era el camino a seguir. Hoy ya han pasado 16 años desde ese comienzo y un sin número de experiencias atesoradas. Es un bello camino para disfrutarlo y que independientemente de la religión que practiques, te ayuda a ser más espiritual, más humano y ético en tus acciones diarias.¿El camino de la meditación qué cambios generó en tu vida en general y concepciones en particular?
Me cambió el concepto y la visión que yo tenía sobre mí mismo. En el pasado solía juzgarme con mucha dureza y nada de lo que hacía me satisfacía. Mi autoestima estaba muy baja y eso afectaba mis relaciones e interacciones con los demás. La meditación me permitió conocerme en profundidad, reconocer los valores que me definen y las debilidades que me afectan. Recuperé la relación de amistad que tenía conmigo mismo, recuperé mi propia felicidad y lo más importante: me amigué con Dios. Aprovecho a contarte que en mi web www.silvioraij.com existen meditaciones gratuitas para bajarse o escuchar y poder dar los primeros pasos en la meditación, se las recomiendo! También dicto cursos de meditación durante todo el año para todo público, sin necesidad de experiencia previa.
¿Cómo has vivenciado tu estadía en la India?
Viajar a India es como viajar al origen de todas las cosas. Allí la gente conserva un profundo respeto por todas las creencias, filosofías o religiones y se valora mucho lo sagrado y espiritual. Voy a India cada año con la única finalidad de estudiar y seguir aprendiendo. El lugar es la sede de la Universidad Espiritual Brahma Kumaris ubicada en el estado de Rajastán, sobre la cima de las montañas Aravali en los Himalayas. La india es un pueblo muy amable y alegre y uno siempre es bien recibido, la siento como mi segunda casa.
Trabajando con el Coaching Ontológico, ¿qué experiencias has tenido?
Tuve la bendición de conocer la maravillosa herramienta del Coaching Ontológico estudiando directamente con uno de sus creadores, Julio Olalla, en la Escuela Newfield Network de Santiago de Chile. Aparte de certificarme como coach profesional y contar con una certificación para trabajar, fue una experiencia renovadora a nivel personal que me movió completamente mi mundo emocional y me llegó hasta el alma. El coaching me ayudó a trazar un puente de unión entre mi conocimiento espiritual y el ámbito empresarial, me ayudó a estar más cerca de las personas y conocer una comunidad de aprendizaje a nivel mundial muy rica de la que me nutro constantemente. ¿Qué hace el Coach? Ayuda o acompaña las personas a que despierten su máximo potencial para lograr sus objetivos en la vida, ya sea a nivel personal, laboral o familiar. Luego de una sesión de Coaching las personas tienen cambios importantes y muy buenas experiencias. He recibido testimonios tales como: “me ayudaste a ver mi vida de una manera diferente” o “ el haber conversado un rato contigo me permite ver las cosas más claras”, “ ahora entiendo lo que necesito en mi vida” entre otras. Este tipo de retroalimentación es lo que más me motiva de mi trabajo, que una persona pueda verse diferente y sea capaz de generar un cambio positivo en su vida.
Ping pong
¿Número de la suerte?
Me gusta el 7. Pero no soy de prestarle mucha atención a los números ni a su significado.
¿Un libro?
Un libro de cabecera fue Siddhartha de Herman Hesse. Es un libro pequeño que se puede leer en un solo día, pero tremendamente sencillo y profundo a la vez. Una joya de sabiduría.
¿Un/a uruguayo/a?
Jorge Drexler es un tipo que me encanta como uruguayo y como músico. Admiro su coraje para dejar su rol de médico y dedicarse totalmente a su pasión: la música. Lo considero un digno embajador uruguayo.
¿Un gran recuerdo?
El recuerdo de mi abuelo, el zeide… “me hiciste emocionar”. Recuerdo que en sus últimos momentos antes de partir, entré sólo a la sala del hospital para despedirlo, me paré a su lado en la cama y pude percibir una suerte de halo de paz que lo rodeaba por completo, eso me impactó. Le di un beso, lo saludé y le pregunté cómo estaba. El me miró en silencio y con sus ojos me dijo -estoy muy bien. Y a continuación me dijo con mucha paz -llama a tu abuela porque yo ya me voy. Al rato, nos avisaron él había muerto. Para mí fue una experiencia única, ya que me ayudó a entender mejor la muerte y no verla como un fin último y trágico sino como un pasaje natural a otra experiencia, a otra aventura.
¿Una convicción?
La eternidad. Que como ser nunca muero, siempre voy a existir. Todos existen, no solo yo, todos trascienden.
¿Una película?
“Contacto” de Robert Zemeckis en honor al famoso científico inglés Carl Sagan. La protagonizaban Jodie Foster y Matthew McConaughey, interpretando los roles de una científica escéptica y un hombre religioso, que compiten por un lugar para viajar a encontrarse con inteligencia extraterrestre. El desenlace es que acaban por encontrar a Dios. Esa película me fascinó por los contrastes y por todo lo que implica.
¿Una pasión?
Hacer felices a los demás. Inspirar a que cada persona pueda encontrar esa fuente personal o valor que enciende su espíritu y que lo hace sentirse realizado y feliz.
¿Una melodía?
“Dibujos en la pared”, era nuestro hit cuando tenía mi grupo de Rock “Tutankamón y las toallas”. Con mis compañeros de banda, ganamos un concurso de rock en los años 80 que organizó la radio “El Dorado” y tuvimos una corta pero emocionante carrera musical. Esa melodía da vueltas en mi cabeza hasta el día de hoy, fueron mis inicios en la música.
¿Una palabra?
Gratitud. Es mi palabra preferida. Agradecer y ser agradecido lo es todo.
¿Un aroma?
Me gusta el aroma de la lima y el limón.
¿Un sabor?
El chocolate, sin dudas, mi favorito.
¿Algo más que quieras agregar?
Me gustaría agregar que todo lo que uno se propone en la vida es posible. Drexler se propuso dedicarse a la música y lo logró, Gandhi se propuso una revolución y la alcanzó, y así hay cientos de ejemplos que nos muestran la fuerza que tiene una visión positiva para alcanzar lo que queremos cuando lo que nos mueve es la pasión pura y cuando el beneficio es para todos.
Hace unos años atrás me propuse dejar el trabajo de 8 horas y dedicarme a lo que me gustaba. Hoy tengo la fortuna de poder estar trabajando desde mi consultora en el desarrollo de programas de Liderazgo, Coaching y Meditación para empresas locales e internacionales y puedo decir que mi trabajo se ha vuelto mi hobby. Incluso mi sueño de publicar un libro se hizo realidad este año. Ya está en las más importantes librerías de Uruguay mi primer libro “Coaching para el Alma-Descubrí el sentido de tu vida” donde comparto mis experiencias trabajando en empresas e institutos aplicando el coaching y la meditación para que las personas puedan manejar mejor sus emociones y ser más eficientes en sus vidas. Entonces mi mensaje final como decía Walt Disney es: “si lo puedes soñar, lo puedes hacer”.